EL APRETÓN DE MANOS, UN ACTO MÁS QUE RELEVANTE septiembre 25, 2018 – Posted in: Empleo – Tags: , ,

Hay momentos mas que relevantes cuando entramos en contacto con una persona, sin duda uno de ellos es el apretón de manos, este acto nos da una primera información que en muchos casos marca ya nuestra impresión final. La importancia es máxima cuando nos enfrentamos a un proceso de selección en el que la decisión depende de tan sólo unos minutos en lo que convives con el entrevistador, si empezamos con mal pie al dar la mano probablemente ya sea inviable remontar la entrevista y nos quedaremos fuera del proceso. Que mejor que analizar con Emilio Gómez Rojo, que ha realizado miles de entrevistas a lo largo de su carrera profesional, las distintas maneras de dar la mano

En un anterior post http://andreslorenzo.com/cuenteme-su-vida-primera-entrevista-de-trabajo habíamos comentado como deberíamos enfrentarnos a una entrevista de trabajo y había ofrecido algunas recomendaciones para poder desenvolverse con soltura ante nuestro entrevistador. Pero realmente la entrevista comienza con el saludo inicial que tiene lugar entre el entrevistador y el candidato, el apretón de manos.

Es posible que el profesional de RRHH haya recibido entrenamiento sobre la comunicación no verbal y esté atento, no solo a nuestras respuestas, sino a como las decimos y a como las expresamos con nuestro cuerpo. Y el primer contacto con nosotros va a ser cuando nos estreche la mano.

El origen del apretón de manos viene de lejos, ya en la Grecia clásica cuando se encontraban dos viajeros por los solitarios caminos para mostrar que no iban a usar sus puñales, enseñaban sus manos libres de armas. Los romanos se agarraban por el antebrazo, demostrando así que no portaban ninguna daga en la manga. Es por tanto, en su origen, un signo para demostrar a la otra persona que no tenemos ninguna intención agresiva hacia él y que es grato su encuentro. Más tarde su uso se popularizo casi mundialmente para cerrar una compraventa o un acuerdo comercial, incluso en países orientales donde se compatibiliza con el saludo de una leve inclinación de cabeza o con el tradicional “wai” tailandés se ha generalizado el estrecharse la mano y para algunas personas y ciertas culturas este gesto tiene tanta validez o más que la firma de un contrato o un acta notarial.

 

¿Pero cómo debemos comportarnos ante una entrevista de trabajo?

Como el hecho de estrechar la mano tiene también un significado de bienvenida, debemos esperar a que sea nuestro entrevistador el que extienda en primer lugar su mano, si no lo hace nosotros podemos hacer una leve inclinación con la cabeza al dar los buenos días o las buenas tardes.

Si observamos en los políticos el gesto de dar la mano veremos que cuando hay una visita de estado el jefe del gobierno local va a recibir al visitante y suele elegir el lado derecho para que así su mano quede en la izquierda de la foto por encima de la mano de su visitante. En una entrevista de trabajo este aspecto no es relevante ya que afortunadamente no habrá ninguna foto de este acto, o eso espero porque las técnicas de selección cada día evolucionan y lo mismo “se hace el muerto” el entrevistador para ver como reaccionamos.

Allan y Barbara Pease escribieron un interesante libro sobre el Lenguaje del Cuerpo en que describen los 7 peores apretones de manos y la información que podemos recibir de los mismos, tanto si somos entrevistados como entrevistadores.

1.- Pescado mojado. – Hay personas que padecen hiperhidrosis o sudoración excesiva, es una sensación poco placentera estrechar una mano sudorosa, por ello de ser nuestro caso deberemos usar pañuelos de papel o un líquido desinfectante para manos. De no hacerlo dejaremos un mal recuerdo en nuestro interlocutor.

2.- Con la punta de los dedos. – Este saludo denota falta de confianza y compromiso. Aunque en algunas zonas de África y Asia es habitual estrechar la mano sin casi presión y sin llevar la mano al final.

3- Torno. – En este caso la palma de la mano se presenta hacia arriba lo que indica dominio y marcar las distancias, normalmente se acompaña con un movimiento hacia abajo y dos o tres sacudidas.

4.- Quebrantahuesos. – Apretón elevadamente intenso, normalmente de personas agresivas que quieren tener el control de la situación.

5.- Brazo rígido. – Si nos encontramos con un entrevistador que nos extiende la mano con el brazo rígido, posiblemente sea alguien que quiere mantener la distancia y no quiere darnos en un principio confianza. Es también un saludo típico de las personas que viven en amplios espacios, recuerda a los saludos de los vaqueros del oeste americano.

6.- Dislocador.- Una vez que tiene nuestra mano entre la suya tira de nosotros como si nos fuera a arrancar el brazo, lo que pretende es llevarnos a su terreno y desequilibrarnos.

7.- Mango de la bomba de agua. – Se caracteriza por ser enérgico y acompañado de sacudidas arriba y abajo. Su autor quiere contarnos algo y no nos deja escapar.

 

Si observamos estos tipos de saludos que son fundamentales en los primeros instantes de una entrevista, una presentación, o en la vida diaria podemos obtener información privilegiada para conocer mejor a la persona con la que vamos a relacionarnos, independientemente que con el paso del tiempo la vayamos conociendo mejor y podamos ratificar o modificar nuestra primera impresión. Pero como ya dijimos en la entrevista de trabajo los cuatro primeros minutos suelen ser vitales para el desarrollo final de la misma y los primeros segundos de este tiempo lo dedicamos a estrecharnos la mano.

El saludo igualitario seria el que ambas personas extienden su mano en sentido vertical, con un ángulo aproximado de 120º y con una presión media, no realizar mucha fuerza ni dejar tu mano muerta.

Un buen ejercicio es comparar el apretón de manos de la llegada con el de la despedida. Si nos mantienen más tiempo cogida la mano que a la llegada o nos tocan ligeramente el codo con la mano libre podemos estar seguros de que habremos causado buena impresión.

La comunicación no verbal en los negocios y en la vida ordinaria nos da muchas pistas de lo que las personas no dicen, pero pueden llegar a transmitir. Qué pena que sea una disciplina que se observe tan poco.

 

COLABORADOR

Emilio Gómez Rojo ha sido Director de RRHH en Grupo OHL y es Profesor asociado de la Universidad Europea de Madrid

https://www.linkedin.com/in/emilio-gómez-rojo-134a8111/